Modelos
de desarrollo de software
Modelo
de cascada
El
modelo de cascada muestra un proceso donde los desarrolladores han de seguir
las siguientes fases de forma sucesiva:
1. Especificación
de requisitos
2. Diseño del software
3. Construcción o
Implementación del software
4. Integración
5. Pruebas (o validación)
6. Despliegue (o instalación)
7. Mantenimiento
Siguiendo
el modelo de cascada de forma estricta, sólo cuando se finaliza una fase,
comienza la otra. En ocasiones se realiza una revisión antes de iniciar la
siguiente fase, lo que permite la posibilidad de cambios (lo que puede incluir
un proceso de control formal de cambio). Las revisiones también se utilizan
para asegurar que la fase anterior ha sido totalmente finalizada; los criterios
para completar una fase se conocen frecuentemente con el término inglés
"gate" (puerta). Este modelo desaconseja revisitar y revisar fases
que ya se han completado. Esta falta de flexibilidad en un modelo de cascada
puro ha sido fuente de crítica de los defensores de modelos más flexibles.
Modelo
de espiral
La
principal características del modelo en espiral es la gestión de riesgos de
forma periódica en el ciclo de desarrollo. Este modelo fue creado en 1988
por Barry Boehm, combinando algunos aspectos clave de las metodologías del
modelo de cascada y del desarrollo rápido de aplicaciones, pero dando
énfasis en un área que para muchos no jugó el papel que requiere en otros
modelos: un análisis iterativo y concienzudo de los riesgos, especialmente en
el caso de sistema complejos de gran escala.
Comentarios
Publicar un comentario